Strauss Zelnick, consejero delegado de Take-Two, ha respondido a las preocupaciones de los accionistas tras el inesperado retraso de Grand Theft Auto VI.

Rockstar Games anunció recientemente el aplazamiento del lanzamiento de GTA VI de otoño de 2025 al 26 de mayo de 2026, lo que retrasa el lanzamiento previsto de Take-Two de 2026 a 2027. Este cambio hizo que las acciones de Take-Two cayeran casi un 8% en las primeras operaciones.

En un comunicado oficial, Take-Two reafirmó su confianza en lograr un crecimiento récord de reservas netas (ingresos) durante los años fiscales 2026 y 2027 a pesar del cambio de calendario.

Zelnick hizo hincapié en el pleno apoyo corporativo a la decisión de Rockstar: "Respaldamos el compromiso de Rockstar de perfeccionar Grand Theft Auto VI. Esta innovadora experiencia exige el tiempo necesario para superar las expectativas de los jugadores, manteniendo al mismo tiempo nuestros inflexibles estándares de calidad."

El consejero delegado aseguró a los inversores un inminente "crecimiento plurianual" en toda la cartera de Take-Two, aunque el retraso en el lanzamiento de GTA VI crea un notable impacto financiero. Según las proyecciones actuales, se prevén unos ingresos de mil millones de dólares en el año fiscal 2026.

Aunque las filiales de Take-Two preparan otros lanzamientos importantes -como Borderlands 4 (septiembre), Mafia: The Old Country, NBA 2K26, además de los próximos proyectos de Bioshock y Judas de Ken Levine-, ninguno iguala la escala comercial prevista de GTA VI.

La comunidad de jugadores se anticipó en gran medida a los posibles retrasos, aunque los fans expresaron su decepción por la falta de imágenes actualizadas junto con el anuncio.